R: Es aquí la manifestación, ¿no?
Fotógrafo: Sí.
R: ¿He cogido un tren al Moscú de 1917 o estoy en coma por un pelotazo de los cerd... de los antidisturbios?
F: Esto es Madrid, amigo. No estás soñando.
Entonces monté en mi martillo volador y fui cortando amapolas con mi hoz.
No, en serio. Eso explica todo. Madriz, joder. Que le pregunten a Napoleon que pasa en la capital cuando la opresión asfixia. Cortamos la cuerda.
Llegamos al punto álgido en el que, como diría Charly
Orgullo de clase. Con el puño en alto y los dientes apretados. Así escuchaba como dos trabajadores vallecanos hablaban para toda la plaza de Sol (Incluidos los cerdos, siempre presentes) y cómo estos le dieron el testigo a dos mineros. El primero se notaba que estaba nervioso. No hay que olvidar que somos obreros, no payasos que dan charlas en congresos. Aún con una timidez mal disimulada y un acento asturiano marcado que evocaba en mi mente recuerdos de varios veranos en Somiedo, descubrió el pastel para quien aún no habían ni abierto el envase. A algunos no nos pillaba de nuevas, pero otros simplemente se estremecieron entre comentarios de: "Nadie se hace 600km por capricho, a esta gente les están quitando el pan". Y creedme, con el pan no se juega. Acaba convirtiéndose en pan duro y reventándole la cabeza a Emilio Botín. Tiempo al tiempo.
El segundo minero no explico los pormenores del robo a mano armada y la condena a muerte que estaban sufriendo las comarcas mineras como hizo el anterior. Simplemente dio las gracias, y yo se las di a ellos. Por hacerme creer en que la revolución es posible, por dar esperanza. Por sacar a nuestra clase de la metafísica de "nuestra derrota es una victoria moral" y hacer que nuestra victoria sea real, tangible.
Para terminar el acto usaron lo mismo que yo usaré para terminar mi entrada y lo que llevo cantando toda la tarde/noche a todo pulmón:
Me jodió no poder estar por la mañana, pero no me olvido de vosotros, cerdos hijos de puta. Ya os dedicaré una entrada sólo para vosotros.
Bueno, para empezar el comentario, decirte que GRACIAS por escribir ahora y no tenerme esperando hasta mañana. Sé que no lo hiciste por mí (obviamente), pero oye, mejor no tenerme esperando, puedo ser muy mala xDDD (nah).
ResponderEliminarYo escuché "estas son nuestras armas" con las manos levantadas... espero que fueran 15emereros de esos, porque sino se me cae un mito. Pero vamos, que sí, que se escucharon otros cánticos y otro gallo cantó. Y eso que no estuve (y te envidio profundamente por haber estado).
Por cierto... ¿sensación parecida a la de fumar cagando o a la de correrte y estornudar a la vez? Quiero saber cómo es eso xDDD
En fin, que resumiendo el comentario (porque no me quiero extender, me ha picado un mosquito en un dedo y me cuesta escribir... xD): vivan los cojones de los obreros. Y que vivan todas y cada una de las personas que hoy estuvieron en la calle con ellos.
Buena entrada, muuuuuuuuy buena (aunque sea un poco roja... xDDDD).
:D
Mi memoria me obliga a dejar por escrito acontecimientos a los que las drogas borrarían o al menos restarían nitidez. Tenía que hacerlo hoy, pero tener lectoras con ganas de que publique ayuda, no creas jajaja.
EliminarLos 15Memos acabarán expropiando bancos, ya verás. Todo es concienciación xDDDD
Un poco, sí jajaja. Viva la Revolución, qué coño!
Estoy bastante satisfecho políticamente en verdá, no sé si se nota. xD
Aaaai las drogas.
EliminarAunque no sé qué digo, si yo las consumo también. Bueno, solo una xD
Eso que dices de los 15Memos (me ha hecho gracia, es la primera vez que lo leo xD), OJALA sea verdad. Por ahí se empieza, pero no sé yo. Aún tienen en la cabeza mucha mierda pacifista.
Nooo, no se nota nada jaja
Yo estoy contenta con cómo han ido hoy algunas cosas. Si los putos cerdos no hubieran dado tanto por el culo... pero a ver, es lo que hay. Estar, estarán.
Hacen bien en estar, y confiados. Un día los mataremos a palos y todos en paz.
EliminarLo de los 15Memos es esperanza sin base, son colegialas xD
No me digas eso de matarlos a palos, que me emociono xD
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